«Cristianos laicos, Iglesia en el mundo»
Queridos hermanos y hermanas en el Señor:
«Ven, Espíritu Santo, llena los corazones de tus fieles y enciende en ellos el fuego de tu amor». Así lleva invocando la Iglesia al Espíritu Santo desde hace muchos siglos, y así lo seguimos haciendo los cristianos del tercer milenio, con la conciencia de que sin el don del Espíritu es imposible asumir los retos y las tareas que el mundo de hoy nos exige. Sigue leyendo