Santo Padre: damos gracias a Dios por este don de la Visita ad limina apostolorum de los hermanos obispos de las provincias eclesiásticas de Burgos, Madrid, Mérida-Badajoz, Oviedo, Pamplona, Valladolid, Toledo, Zaragoza y Ordinario Militar. En nombre de los señores arzobispos y obispos tengo la honda satisfacción y el gozo de agradecerle de corazón su cariñosa y paternal acogida. Sigue leyendo
Archivo por meses: enero 2005
Carta a todos los niños de Madrid con motivo de la Infancia Misionera
«Abre tus ojos a la misión»
Mis queridos niños y niñas:
¿A que no sabéis qué es lo más atrayente que Dios ha puesto en vosotros? Os lo diré enseguida: son los ojos, siempre grandes, por donde se asoma la belleza de vuestra alma y vuestro interior. Así le ocurría a Jesús. Sus ojos eran especiales, y cuando los primeros discípulos se encontraron con su mirada quedaron cautivados por el amor inmenso que transparentaba. Sigue leyendo
Homilía en la Apertura de la Asamblea Sinodal
Catedral de La Almudena, 22.I.2005
(Is 8,23b-9,3; Cor 1,10-13.17; Mt 4, 12-23)
Mis queridos hermanos y hermanas en el Señor:
I. Hemos llegado al momento culminante del III Sínodo Diocesano de Madrid. Con esta solemnísima celebración de la Eucaristía en la Catedral de Nuestra Señora la Real de la Almudena, Iglesia Madre de la Archidiócesis, inauguramos la Asamblea Sinodal. Sigue leyendo
Ante la apertura de la Asamblea del III Sínodo Diocesano de Madrid
Mis queridos hermanos y amigos:
Hemos llegado a la última y decisiva etapa del III Sínodo Diocesano de Madrid. El camino sinodal que iniciábamos juntos en el curso pastoral 2002/2003 ha llegado a su momento culminante. Sigue leyendo
Se manifestó el Señor. Luz de los pueblos.
Mis queridos hermanos y amigos:
El Señor se ha manifestado de nuevo como Luz de las gentes. Así aconteció cuando los Magos de Oriente vieron su estrella y acudieron a adorarle en Belén de Judá, donde se encontraba: “entraron en la casa, vieron al niño con María, su madre, y cayendo de rodillas le adoraron; después abriendo sus cofres, le ofrecieron regalos: oro, incienso y mirra”. Sigue leyendo