Conferencia pronunciada en la Basílica de la Purísima Concepción, Barcelona, 11 de marzo de 2012; 19’00 horas.

La JMJ-2011 y la Nueva Evangelización

Historia y Presente[1]

I.             INTRODUCCIÓN

El Santo Padre Benedicto XVI en la audiencia del 24 de agosto en Castelgandolfo, tres días después de las extraordinarias jornadas vividas en Madrid en la XXVI Jornada Mundial de la Juventud, la calificaba como “un acontecimiento eclesial emocionante. Cerca de dos millones de jóvenes de todos los continentes vivieron, con alegría, una formidable experiencia de fraternidad, de encuentro con el Señor, de compartir y de crecimiento en la fe: una verdadera cascada de luz. La semana de Madrid había sido precedida y preparada por “los días en las Diócesis”, con frutos de experiencia eclesial y de vivencia cristiana que hicieron presagiar y esperar lo que iba a suceder en los días del encuentro con el Santo Padre en Madrid. Una excelente muestra de la riqueza espiritual y apostólica de lo vivido en esos días en las Diócesis fue la Ciudad de Barcelona. La valoración de la JMJ-2011 como “una cascada de luz” adquiere en el discurso del Papa a la Curia Romana con motivo de las felicitaciones de Navidad (12.12.2011) un especial significado en relación con la Nueva Evangelización: “La magnífica experiencia de la Jornada Mundial de la Juventud, en Madrid, ha sido también una nueva medicina contra el cansancio de creer. Ha sido una nueva evangelización vivida. Cada vez con más claridad se perfila en las Jornadas Mundiales de la Juventud un modo nuevo, rejuvenecido, de ser cristiano”. Modo nuevo que sintetiza a continuación en cinco puntos: una nueva experiencia de catolicidad; un modo nuevo de vivir el ser hombres; la adoración; la presencia del Sacramento de la Penitencia; la alegría. Sigue leyendo