Palabras de saludo y bienvenida del Emmo. Sr. Cardenal-Arzobispo de Madrid
Los Negrales (Madrid) 10.X.2006
Me complace en saludar y dar la más cordial bienvenida a Madrid, más concretamente, a la Archidiócesis de Madrid, a todos los participantes del I Congreso Mundial de las Televisiones Católicas. Saludo con afecto fraternal a los Señores Cardenales, Arzobispos y Obispos presentes, al Señor Nuncio Apostólico en España, y dirijo naturalmente palabras de especial afecto y gratitud al Excmo. Sr. Arzobispo-Presidente del Pontificio Consejo para las Comunicaciones Sociales y a sus colaboradores más inmediatos, junto con la Coordinadora de Medios de Comunicación Social de nuestra Archidiócesis de Madrid, el Secretario de la Fundación García Morente y todo el equipo de los que han trabajado sacrificada y generosamente en la preparación de este Congreso, de cuya importancia para la vida y la misión de la Iglesia a los largo y a lo ancho de su geografía católica ¡universal! se pondrá de manifiesto en las densas jornadas de estudio y reflexión que nos esperan, en las que se entremezclarán pensamiento teológico, ciencia y saberes técnicos y amplia y rica experiencia pastoral. Me es muy grato, además, saludar al Excmo. Sr. Obispo de Jerez, Presidente de la Comisión Episcopal de Medios de la CEE, y al Director de su Secretariado y a todos los que han ayudado desde la Conferencia Episcopal Española técnica y económicamente para el buen desarrollo de las sesiones de estudio y de trabajo del Congreso. No puedo tampoco dejar de saludar expresamente con palabras de gratitud al Rvdo. P. F. Lombardi, Portavoz y Jefe de Prensa de la Santa Sede y Director de Radio Vaticana, que nos honra con su presencia y nos enriquecerá con la aportación de su probada y valiosa experiencia en el campo de las Comunicaciones Sociales de la Iglesia, adquirida desde esa atalaya privilegiada que es Roma y desde el oficio de cuidar directamente la información referida al Santo Padre y a la actividad de la Santa Sede.
Permítaseme, finalmente, saludar a las autoridades civiles presentes en este acto, especialmente, al Secretario General del Gobierno de la Comunidad de Madrid y a la Sra. Alcaldesa de Alpedrete, en cuyo término municipal se encuentran estas instalaciones de la Institución Teresiana, que nos ha abierto con finura de espíritu y generosidad eclesial las puertas de esta Casa ¡su Casa! y que estos días será la nuestra.
El simple hecho de la celebración de este I Congreso Mundial de la Televisiones Católicas revela, al menos, dos aspectos relevantes del momento actual de la Iglesia en su toma pública de conciencia de lo que significa pastoralmente en el ejercicio de su misión evangelizadora el, sin duda, prodigioso instrumento de comunicación social que es la Televisión.
Por una parte, se percibe con una inesquivable claridad histórica que con la Televisión el anuncio y la noticia del Evangelio puede llegar cuantitativa y cualitativamente a lugares, ambientes y personas no alcanzables por otros caminos de comunicación, tradicionales o no. La viveza y plasticidad expresivas, propias del medio televisivo, pueden informar y formar al televidente con una positividad en sus contenidos y con una capacidad dialéctica para contrarrestar y superar falsedad y ambigüedad informativa y de opinión en torno a las verdades y acontecimientos centrales de la Fe y de la vida de la Iglesia, como no sucede con ningún otro de los conocidos medios de comunicación social. Y, por otra, se constata, cada vez con mayor evidencia, que una propuesta televisiva, informada en toda su programación, –en la específicamente religiosa y en la generalista–, por la visión cristiana del hombre y del mundo, es prácticamente inviable empresarial y profesionalmente si el titular o el soporte jurídico-social de la Cadena no pertenece al ámbito canónico de la Iglesia -en la forma que proceda-.
Ha llegado pues el momento histórico de emprender el camino de un asentamiento institucional de las Televisiones Católicas en las distintas regiones geográfica y culturales donde la Iglesia está presente y de estrechar y articular con realismo pastoral pero con amplitud de miras y de disponibilidad eclesiales un sistema de relaciones mutuas y cooperación económico-financiera, técnica y pastoral entre todas ellas. La Archidiócesis de Madrid con su canal TMT, asociado a “Popular Televisión” -canal que la C.E.E. promueve y apoya-, unida a las demás diócesis de España, está abierta plenamente a la colaboración decidida con todo lo que implique avanzar en la consecución de este objetivo eclesial.
Estoy seguro que este I Congreso, cuyos trabajos encomiendo al cuidado maternal de Ntra. Señora la Virgen María, Madre de la Iglesia, bajo la advocación de “La Almudena”, la Patrona de Madrid, la Virgen que ha dado a luz para el mundo al Verbo, al Logos e Hijo Unigénito del Padre, al Dios hecho carne por nuestra salvación, supondrá un paso decisivo en la constitución y formación de una red mundial de Televisiones Católicas.
¡Muchas gracias a todos!