Al tener conocimiento esta misma tarde de la explosión de un coche bomba que ha provocado un número considerable de heridos, el Cardenal Arzobispo de Madrid, Antonio María Rouco Varela, junto con sus Obispos Auxiliares, condenan enérgicamente esta acción violenta que atenta contra la vida de personas indefensas e incluso niños.
Al hacerse presente con su afecto y su oración en el dolor de las familias afectadas, piden al Señor, con toda la Iglesia de Madrid, el pronto restablecimiento de los heridos y el fin de esta dramática escalada de violencia.