“Enviados a evangelizar”
Queridos hermanos y hermanas en el Señor:
“En Pentecostés, cincuenta días después de la Resurrección, Jesucristo glorificado infunde su Espíritu en abundancia y lo manifiesta como Persona divina, de modo que la Trinidad santa queda plenamente revelada. La misión de Cristo y del Espíritu se convierte en la misión de la Iglesia, enviada para anunciar y difundir el misterio de la comunión trinitaria” (Compendio, 144). Sigue leyendo