En el 1 de mayo de 2001. Fiesta de San José Obrero

Testigos del amor en el mundo del trabajo

Mis queridos hermanos y amigos:

El 1 de mayo, día del Trabajo no ha perdido ni vigencia ni urgencia con el paso del siglo XX al siglo XXI. No la ha perdido en sí mismo y en su significado social, ni la ha perdido para la Iglesia ni para los cristianos. El Santo Padre no vacilará en recordarnos en su Carta Apostólica “Al comienzo de Nuevo Milenio”, evocando su encuentro con los Trabajadores el 1º de mayo pasado en el Año Jubilar, Sigue leyendo