Capilla del Palacio de la Zarzuela 14.I.2006; 12’30 horas
(Ez. 36, 24-28; Sal 22; Jn. 7, 37b-39)
Majestades,
Altezas,
Excmo. Sr. Arzobispo,
Excelentísimos Señores y Señoras.
Mis queridos hermanos y hermanas en el Señor:
El día del Bautismo de un niño es siempre un día de gran alegría –en el fondo, una alegría única y singular– para sus padres, su familia y para toda la Iglesia, la gran familia de los hijos de Dios; en el caso de esta niña, que vamos a bautizar, doña Leonor, una alegría, sin duda, que comparte España entera. Sigue leyendo