Carta Pastoral del Cardenal-Arzobispo de Madrid para la Jornada Diocesana de los Misioneros Madrileños

Domingo 20 de mayo de 2012

“¡Sé laico misionero!”

Mis queridos diocesanos:

Dentro de pocos días celebraremos la solemnidad de la Ascensión del Señor, la fiesta del final del tiempo de Cristo resucitado antes de volver a la derecha del Padre en el cielo, llevando consigo nuestra humanidad, para sentarnos también a nosotros “en el cielo con Él”, como nos dice San Pablo (cf. Ef 2, 6), y desde esa unión con el Cielo llevar a cabo su mandato de ir a toda la tierra para “proclamar el Evangelio a toda la creación” (Mc 16, 15). No hay mejor fiesta que ésta de la Ascensión del Señor, sin duda, para recordar a nuestros misioneros madrileños, enviados como los primeros apóstoles hasta los confines de la tierra. Ojalá tengan ellos, y toda nuestra comunidad diocesana de Madrid, la misma experiencia de los primeros discípulos en aquella mañana en la que el Señor se eleva sobre todos ellos y los bendice, con la promesa de que les enviará el  Espíritu Santo. Sigue leyendo

APÓSTOLES PARA LA NUEVA EVANGELIZACIÓN. Carta Pastoral en el Día Nacional del Apostolado Seglar y de la Acción Católica

«APÓSTOLES PARA LA NUEVA EVANGELIZACIÓN»

Carta Pastoral del Emmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio Mª Rouco Varela,

Cardenal Arzobispo de Madrid

en el Día Nacional del Apostolado Seglar y de la Acción Católica

 

Solemnidad de Pentecostés, 27 de mayo de 2012

Queridos hermanos y hermanas en el Señor:

En la celebración de la solemnidad de Pentecostés de este año deseo recordar la experiencia del Espíritu Santo que vivimos en el agosto pasado en Madrid, durante la celebración de la XXVI Jornada Mundial de la Juventud. Allí, una inmensa multitud de jóvenes se reunió junto al Papa, con sus obispos, sacerdotes y educadores, para celebrar la presencia gozosa del Señor resucitado. Esta magna convocatoria fue, al mismo tiempo, un vivo testimonio de la universalidad y de la vitalidad de la Iglesia. Por la gracia del Espíritu Santo, el Evangelio se sigue proponiendo a cada generación como la única respuesta verdadera y plena a los grandes interrogantes de la humanidad, que, especialmente en el periodo de la juventud, se presentan con especial urgencia. Con la ayuda de las catequesis de los obispos, de las celebraciones eucarísticas, de la fiesta del perdón, de la participación en los actos culturales y los luminosos mensajes que nos dejó el Santo Padre, la presencia del Señor se hizo especialmente visible en nuestra Archidiócesis. Aquellos días todos pudieron ver con sus propios ojos la belleza de ser cristiano. Por eso, la JMJ 2011 supuso también una llamada a comunicar esta vida y a transmitir este gozo a todos los hombres. Resuenan aún muy vivamente las palabras que el Papa dirigió a los jóvenes en la homilía de la Eucaristía de clausura en el aeródromo de Cuatro Vientos: «No os guardéis a Cristo para vosotros mismos. Comunicad a los demás la alegría de vuestra fe». Las Jornadas Mundiales de la Juventud son un claro exponente del nuevo ardor, de los nuevos métodos y del nuevo lenguaje con los que el Beato Juan Pablo II, iniciador de las mismas, definía los rasgos de la nueva evangelización. Sigue leyendo